Desgaste y Reforma (2) desde 1582 hasta 1588

El periodo analizado es el comprendido entre la tercera entrada en los Países Bajos de los españoles, agosto de 1582, y la preparación [y fracaso] de la Jornada de Inglaterra, en 1588.

LLEGADA DE TROPAS Y REFORMA

En abril de 1580 se repite la salida de las tropas españolas, de igual manera que se produjo tres años antes, tras la promulgación del Edicto Perpetuo.

En 1582, comenzaban de nuevo a venir las tropas extranjeras, tan malquistas por los Estados. A finales de julio llegaban dos tercios, a cargo del maestre de campo Pedro de Paz: 5105 hombres. Uno [Tercio de Sicilia] quedaría a cargo de Pedro de Paz [1a] mientras que el otro [Tercio de Lombardía] pasaría a las manos del coronel Cristóbal de Mondragón [1b], que hasta entonces dirigía un regimiento de valones.

En octubre de 1582, tenemos la primera muestra realizada: 4636 españoles. Habían caído [combate, enfermedad y alguna que otra deserción] quinientos soldados de los llegados hacía apenas tres meses: un 10% de los efectivos.

En junio de 1584, llegan tres tercios a cargo de Pedro de Tassis [capitán]: 4915 hombres que venían [vía Italia] de rendir las islas Terceras o Azores, en la última fase de la guerra de Portugal. De estos tres tercios, se reformaron [2a] los dos que venían sin maestre de campo: el de la Liga Vieja que había sido de Lope de Figueroa, y el que había sido de Bobadilla, pasando a engrosar las filas del Tercio de Sicilia [Pedro de Paz/Juan del Águila] y del de Lombardía [Mondragón]. El tercero, gobernado por Agustín Iñíguez se mantuvo por un tiempo. [2b]

Narra Alonso Vázquez como durante el asedio de Amberes, volando los rebeldes el puente que cerraba la navegación del escalda en abril de 1585 "en las barcas que estaban en la estacada y puente murieron más de ochocientos soldados españoles y muchos Oficiales y caballeros, gentiles hombres entretenidos cerca la persona de Alexandro, y otra gente de muy gran cuenta".  800 soldados muertos en una sola acción del enemigo. 

A finales de agosto de 1585, llega el Tercio de Bobadilla, a cargo de su maestre de campo Francisco de Bobadilla, con 2195 hombres en las listas.

En 1586, llega el tercio de Antonio Manrique, con 2.000 hombres alistados. [3]

En 1587, llegan los tercios de Zúñiga [4a]: 2662 soldados en 17 banderas, a primeros de noviembre, y el de catalanes de Queralt [4b]: 1900 hombres en 17 banderas, a primeros de diciembre.

El 29 de abril de 1588, a falta de tres meses para embarcar para la Empresa de Inglaterra [9 de agosto], se toma muestra: 9.668 hombres en ¿89 banderas?.


EL PORQUÉ DE TANTA REFORMA

Si uno realiza una suma de las tropas llegadas entre agosto de 1582 y diciembre de 1587, tenemos la suma de 18777 soldados arribados a los Países Bajos desde España vía Italia. Si uno compara esa cifra con la muestra tomada en abril de 1588, resulta que nos faltan 9.109 hombres. Algo menos del 50% de bajas en poco más de cinco años.

Si uno apura, y relativiza las cifras, resulta lo siguiente: los tercios de Zúñiga y Queralt, que suman 4562 soldados, no entraron en combate en el periodo comprendido entre la fecha de su llegada y la de la toma de la muestra, en tanto Alejandro Farnesio tenía instrucciones del rey de no emprender con las tropas españolas ninguna facción en los Países Bajos, reservándolas como tropas de choque para el desembarco de Inglaterra.

Lo cual quiere decir, que deberíamos poner en relación las bajas con el total de tropas que sabemos entraron en combate: entradas durante el periodo Ago82-Dic87 menos el saldo a abril de 1588, descontados los soldados nuevos que llegaron a finales del 87. Resulta de ello que de 14225 hombres que habían entrado antes de finales de 1587, 9109 habían causado baja de las listas de muestra. O sea, un 64% de pérdidas [5]

Así es normal que fuese necesario este continuo rehinchimiento de los Tercios, mientras que por el sistema de la reforma, se aprovechaba la experiencia de los soldados veteranos poniendo a su lado a los bisoños, o soldados nuevos, que ganaban maestros para su formación, y se "evitaban" situaciones como las de tener 40 soldados en una compañía [6]. Cuando las compañías debían contar en teoría con 250 hombres, lo normal es que estuvieran - en sus mejores tiempos - entorno a los 150-180. A partir de aquí, decrecía su número hasta por debajo de los 80, cuando se consideraba que estaban disminuidas, en tanto no llegaran los reclutas desde Italia, para poder ser "reformados".

Vemos que en este periodo de 6 años, llegan 9 tercios nominales. De estos, 4 serían reformados [y anulados] a su llegada, y 2 más, antes de cumplir el año de su llegada a Flandes. Sólo "sobrevivirían" como unidades los dos tercios viejos que llegaron en 1582 desde Sicilia y Lombardía, y el de Bobadilla.

Por los repartimentos de la gente en los alojamientos en septiembre de 1588, tras el embarque fustrado de la jornada de Inglaterra, sabemos que el Tercio de Manrique contaba con 24 banderas, el de Sancho de Leiva 14, y el de Bobadilla [gobernado por el capitán Manuel de Vega] con 16 que quedaron en Diest a cargo de Vega, y otras 8, de las cuales tenemos noticia por las 24 banderas [tafetanes] que tenían en los baules del bagaje que fue asaltado en Tirlemont en abril de 1589 y qye se habían mandado hacer para la jornada de Inglaterra, pero que no habían sido arboladas aún cuando fueron tomadas.

Véase también

Desgaste y reforma desde 1567 hasta 1574


NOTAS

[1a] En 1584 a cargo de Juan del Águila. En 1588 a cargo de Juan Manrique de Lara. Los Tercios eran conocidos por lo general, por el nombre del maestre de campo que los gobernaba, o en su defecto, por el apodo. Pero la denominación genérica [Tercio de Sicilia] es útil, en tanto permite estudiarlos con continuidad.
[1b] En 1588 a cargo de Sancho Martínez de Leiva.

[2a] En la reforma, bien se disolvían las compañías, pasando los soldados a servir a otros capitanes cuyas compañías quedaban engrosadas, o bien se mantenían las compañías, pasando a servir estas en los tercios que se querían reforzar, desapareciendo los tercios que eran reformados.
[2b] Hasta que en 1586, quedó a su vez reformado y extinguido, en una comisión reformadora a cargo de Francisco de Bobadilla, que reformó 15 compañías de "capitanes ausentes", repartiendo los soldados en los tres tercios "viejos" restantes: Sicilia, Lombardía y Bobadilla [aunque era más viejo el de Iñíguez, se mantuvo el de Bobadilla y se reformó éste, lo cual demuestra que la antigüedad no suponía tabla de salvación frente al mérito militar].

[3] Reformado en mayo de 1587, engrosando las filas de los tres tercios viejos, antes nombrados.

[4a] Fue reformado a su llegada, repartiéndose las tropas [soldados sueltos y compañías enteras] entre los tres tercios viejos.
[4b] Tuvo una vida un poco más larga que su "compañero" Zúñiga: sería reformado en octubre de 1588, repartiéndose las tropas[soldados sueldos y compañías enteras] en los tres tercios viejos.

[5] Y aunque siempre puede decirse que en los tercios de Zúñiga y Queralt enfermarían y morirían algunos soldados en ese periodo de pocos meses, despreciar esa cifra no creo que de a lugar a tergiversar el resultado final.

[6] Se intentaban evitar, sería lo correcto, pues la referencia es "real" acerca de dos compañías que no sumaban 80 hombres.

2 comentarios :

hunziker dijo...

El tercio de la Liga (Figueroa)que llegó a Flandes en 1584 no iba completo; de ahí que no desapareciera por el hecho de que se reformaran las compañías que llegaron a Flande sin su MdC. Tiempo atrás caí en el mismo error, sin duda que inducido por la misma fuente (A. Vázquez); por eso llegué a hablar de 2 tercios de Figueros cuando, en realidad, fueron el mismo. Creo que en mi web (tercios.org) hablo sobre el proceso de reconstitución del tercio en Andalucía. En realidad, estpy seguro pero no sabría decirte donde lo hago.

Carlos Valenzuela dijo...

Efectivamente, Alonso Vázquez narraba:

acabada ya la jornada de las Terceras y el marqués de
Santa Cruz roto á Felipe Estroci, y guarnecidas aquellas islas,
se rocogieron los tercios de infantería española, y los tres dellos
marcharon á Italia y desde allí á los Estados de Flandes,[...] que eran el de la Liga vieja,
que fué del Maestre de campo D. Lope de Figueroa, y el que
había sido en Portugal del Maestre de campo D. Francisco de
Bobadilla, que murió en Madrid, del Supremo Consejo de
Guerra del Rey , nuestro señor , y el tercero era del Maestre de
campo Agustín Iñiguez, natural de la provincia de Álava,
valeroso y prudente Capitán ; los dos primeros por ir sin Maestres
de campo se reformaron.

Un saludo